COMPARTEN TÉCNICAS EN NEUROCIRUGÍA

Comparten técnicas en neurocirugía

El especialista Édgar Nathal en conjunto con la Academia Aesculap México organizaron un curso de actualización en esta disciplina.

Reforma | Suplemento DR | Dulce Soto

Hace 50 años, aproximadamente, requerir un tratamiento quirúrgico para atender un problema cerebrovascular era visto como una sentencia de muerte, afirma Édgar Nathal, profesor de neurocirugía vascular del Instituto Nacional de Neurología.

Esto se debe a que en ese entonces la tasa de mortalidad de una cirugía para atender un aneurisma cerebral, por ejemplo, era de entre 60 y 70 por ciento en los países en desarrollo. En México alcanzaba hasta el 90 por ciento.

En la actualidad, expone, gracias al desarrollo de la neurocirugía, impulsado por médicos de distintas partes del mundo, estas intervenciones son seguras, con una mortalidad de sólo dos por cada 100 operados.

“Gracias a todo el refinamiento de esta disciplina se ha logrado bajar la mortalidad impresionantemente, a tal grado de que ahora operarse un aneurisma que no se ha roto es una cuestión muy segura, igual que si te operas del apéndice o de la vesícula”, dice.

La clave para que México progresara en la neurocirugía vascular fue compartir el conocimiento con expertos de otros países, algo necesario, explica el especialista, pues los problemas cerebrovasculares se encuentran entre las primeras cinco causas de muerte en el país y en el mundo.

Para continuar actualizando a los neurocirujanos en el tratamiento de estas enfermedades, en el Instituto Nacional de Neurocirugía, en conjunto con la Academia Aesculap México, se llevó a cabo el “Curso en Vivo de Revascularización Cerebral y Microcirugía Vascular”, impartido por pioneros en esta área, reconocidos a nivel mundial.

El objetivo: mejorar la atención quirúrgica de las enfermedades cerebrovasculares, pues en el país su incidencia representa un desafío por los altos porcentajes de obesidad, diabetes e hipertensión de la población, además del envejecimiento, factores clave para desarrollar un problema de este tipo, apunta el médico.

Los participantes asistieron en vivo a la realización de 10 neurocirugías demostrativas de casos complejos, entre los que destacaron aneurismas, bypasses cerebrales, malformaciones arteriovenosas y angiomas cavernosos, detalla Nathal.

A decir de Verónica Ramos, directora de la Academia Aesculap México, hacía 15 años que en el país no se realizaba un curso de actualización dedicado específicamente al tratamiento quirúrgico de los problemas cerebrovasculares.